Comprar, tirar, comprar, tirar… es tan habitual que ya ni nos lo cuestionamos, ¿pero qué tiene de relevante? ¡Es verdad! …no es un hecho reciente, ya que parte de la propuesta emitida en 1932 de “Ending the depression through planned obsolescence”, del economista norteamericano Bernard London. (1)
En este documento se expuso el controvertido planteamiento de emular la expiración de los vegetales sobre la caducidad de los aparatos u objetos electrico-mecanicos como medida resolutiva a la “Gran Depresión” económica, tal como describe el mismo nombre del planteamiento.
Sin un antecedente ético, aparentemente dicha propuesta no procede aún hasta nuestros días y, de los derechos del consumidor surgieron instancias que en teoría velan por el cumplimiento de éstos, sin embargo sigue siendo una constante a la reflexión sobre “ya no los hacen como antes”.
La realidad nos dice que las grandes compañías y/o empresas decidieron ponderar el uso de componentes tanto mecánicos como tecnológicos para ofertar sus productos a un coste bajo.
La producción en masa y la diversificación de materiales de la industria química se aunaron a esta justificación y de la promesa de las marcas por las garantías de hasta 10 años o de por vida sobre sus productos sólo queda el recuerdo.
Como resultado a lo anterior se agregó al término de obsolescencia la palabra: “intrínseca”, que hacía alusión a una caducidad por “naturaleza de fabricación y no intencionada”, ¿cuestionable?…
Quiénes se pronuncian a favor de dicha definición (compañías y/o empresas) argumentan que ello no es más que una respuesta por la creciente competitividad en los diferentes mercados, y que en todo momento está primero el cliente, esto es: la disposición de un crisol de producción para una gran diversidad de necesidades.
El principal nicho de aplicación de la obsolescencia programada son las tecnologías de la información y la comunicación (TICs), prioritariamente a través del Internet, simple y sencillamente porque es mediante los dispositivos, móviles e inalámbricos, que tanto emisores como receptores realizan diversas interrelaciones comunicativas en base al entorno 2.0 (feedback) y recientemente 3.0 (humanización del esquema).
Los defensores de la obsolescencia tienen diversos argumentos a considerar, que parten de la reflexión de que “la tecnología nos hace viejos”, ejemplo de ello es que al adquirir algún dispositivo o elemento de recién puesto al mercado, socialmente se nos otorga un cierto estatus, el mote de la modernización, ¿tardía?.
A todo lo anterior se suma el concepto de “la ‘moda’ sobre el diseño” como el conjunto de normas estéticas socialmente no sólo aceptadas, sino además exigidas dentro del contexto conductual enmarcado por el desarrollo urbano; esto es: que sí los tonos de temporada, que sí los accesorios, que sí las tendencias de estación, y un extenso etcétera.
Con mayor peso a favor de quienes comulgan adeptos a la obsolescencia sugieren el avance tecnológico, es decir, de los términos de investigación y desarrollo (I + D), ya que además sugieren la adición del factor de innovación (I + D + i) para generar los grandes avances de la humanidad; ¿o eran avances de los mercados por necesidad y/o la creación de necesidades por venta?
¿Debemos estar tranquilos?… Acciones en contra de la obsolescencia intrínseca recientemente se han conformado, de sus detractores, en Europa han alzado la mano, en donde en busca de un marco legal se pretende sancionar a quienes (empresas y/o compañías) continúen fabricando productos “defectuosos” cuya vida útil está programada para promover la rotación en ventas.
Por su parte, Baker & McKenzie®, bufete de abogados multinacional (con sede en USA), de la mano del Alemán Prof. Dr. Ulrich Ellinghaus, redactó en un estudio al respecto una serie de medidas, que incluyen “la especificación de la vida útil esperada y una clara advertencia de que el producto no podrá ser reparado o que no se disponen de piezas como repuesto”. (2)
Destaca entre las medidas además la “adición de operación de normas mínimas para la reparación (obligatoria), interfaces y componentes del aparato electromecánico o dispositivo. “introducción de un ‘códice de la calidad del producto sostenible en la economía de reciclaje’ obligatorio y de un ‘acto responsabilidad de productos’ (…) así como la Introducción del concepto de ‘vicio oculto’ como parte de la garantía del derecho civil. (2)
La reflexión no sólo refiere a la economía, ya que a la “oferta por necesidades” hay que considerar también la negativa por la fabricación de elementos de repuesto, o el engorroso proceso de petición de los mismos, y la fabricación de objetos con materiales no renovables. Lejos quedaron los locales donde, ya fuera a través de las mismas empresas o por terceros, que se ofrecía la reparación o restauración de inmuebles y con ello surgió la basura tecnológica.
Resulta mejor tirar y comprar… porque es viable, porque la opción es más económica, porque hay que consumir, etcétera. Sin embargo es necesario replantear no sólo el avance sobre el concepto de I + D + i sobre el manejo de los desechos tecnológicos y su manejo en torno a la devastación del medio ambiente y su sostentabilidad como variables en marco del tan buscado sufijo smart por las grandes ciudades (smart cities).
A esta situación sería inútil buscar culpables… de los gobiernos, las transnacionales, instituciones, el marketing, la ciudadanía… no hay que imaginar elementos de estrategia conformados por malvadas mentes que pretenden manejar nuestras decisiones para el dominio del mundo. Evidentemente, y como en la mayoría de los problemas sociológicos se parte de la educación y formación de la población… No tanto a acciones en contra del sistema económico, sino a la reflexión de elección de cada individuo, de su propia caducidad intrínseca en relación al consumo.
Propuesta resolutiva o estrategia de venta
Hace casi un año, la multinacional y gigante del entorno de Internet Google® presentó al público (3) un proyecto en el que investigadores a su cargo han estado trabajando desde hace algún tiempo en torno al desarrollo de un dispositivo móvil que promete una vida más útil por su estructura de funcionamiento.
Se trata del proyecto denominado “Ara” (video Project Ara) que de acuerdo con sus desarrolladores, pretende ser más que el prototipo de un smartphone, que ofrecerá a sus usuarios la posibilidad de poseer un dispositivo con un periodo extenso de vida útil ya que sus elementos son intercambiables.
Quienes adquieran esta tecnología no tendrán que preocuparse por cambiar de dispositivo, ya que si se desea sustituir alguna pieza por cualquier causa, expandir su capacidad o agregar algún gadget podrá adquirirlos por separado de acuerdo a sus necesidades.
De este modo y partiendo del movimiento auto maker, el proyecto prevé la distribución de las piezas que componen al Ara, como si de forma divertida se tratara de un LEGO® o bien como si se emulara a un ordenador tipo ensamblado; lo que para algunos representaría una alternativa más de cara a la llamada obsolescencia programada, ya se ha puesto bajo la lupa….
Bajo la promesa de “un smartphone más duradero que se ajusta a tus necesidades” se pone en duda una solución absoluta al problema de caducidad programada, e incluso se deja entrever como una estrategia de mercado más que una propuesta resolutiva de cara a la obsolescencia intrínseca, es decir, la aplicación de la estrategia de diferenciación del producto por en el proyecto de comunicación de Google® en su incursión al competido mercado de los smartphones.
¹ • Bernard London, 1932, «Ending the Depression Through Planned Obsolescence» escrito recuperado y consultado por la Universitat de Wisconsin, digitalized by Google® http://babel.hathitrust.org/cgi/pt?id=wu.89097035273; view = 1up; seq = 17
² • Ulrich Ellinghaus, 2013, «German study on» Planned Obsolescence «calls to improve product life-time by imposing mandatory estàndards» Consultado el 2015.05.20 a: http://www.complianceandrisks.com/german-study-on-planned-obsolescence-calls-to-improve-product-life-time-by-imposing-mandatory-standards/
³ • Vídeo presentación Project Ara June 2014 – Vídeo – consultado el 2015.05.20 YouTube cuenta oficial Google Developers® https://www.youtube.com/watch?v=cV8JDSO1NS8